Este objeto, aunque ya tenga muchos años, puede tener usos inesperados y mucho valor si está bien conservado.
Aunque parezcan un simple recuerdo escolar, los lápices de colores usados pueden valer más de lo que creés. Con el auge de lo vintage y el coleccionismo, muchos de estos objetos se convirtieron en piezas buscadas. Conocé los detalles.
El interés se centra en modelos antiguos, marcas reconocidas o ediciones especiales. Algunas personas pagan cifras elevadas por sets completos o por lápices difíciles de conseguir. Incluso, si están gastados, pueden utilizarse en proyectos artísticos.
Además del valor económico o sentimental, estos lápices pueden reutilizarse en distintos ámbitos. Por ejemplo, muchos los usan en manualidades o los reciclan para decoración.
Qué podés hacer con tus lápices viejos:
- Venderlos a coleccionistas online.
- Usarlos para crear cuadros o esculturas.
- Armar marcos o lámparas con sus colores.
- Donarlos a escuelas o espacios comunitarios.
- Transformarlos en souvenirs o llaveros.
Conservarlos en buen estado y saber qué tipo tenés es clave. Marcas como Faber-Castell o Prismacolor tienen ediciones muy valoradas en el mercado actual.