Un truco casero permite conservar el queso más tiempo sin que se seque ni pierda sabor
El queso es un clásico de la heladera argentina y está presente en miles de comidas. Pero si no lo conservás como corresponde, puede secarse, perder textura o arruinarse antes de tiempo. Mucha gente lo deja en la mesada o lo envuelve en papel aluminio, pero eso solo acelera su deterioro. Conocé los detalles.
El truco para guardar el queso en la heladera y mantenerlo fresco sin que se arruine
La mejor forma de conservar el queso es envolverlo en papel manteca o encerado, que permite que respire sin acumular humedad. Después, guardalo dentro de un recipiente hermético o en una bolsa con cierre, para protegerlo de los olores fuertes de otros alimentos. Lo ideal es ubicarlo en la parte baja de la heladera, donde la temperatura es más estable y ayuda a mantenerlo fresco por más tiempo.
Según el tipo de queso, el tiempo de conservación varía:
- Quesos blandos (brie, camembert, mozzarella): hasta 2 semanas bien envueltos y sin contacto con el aire.
- Quesos semiduros o duros (gouda, parmesano, provolone): pueden durar varias semanas si se mantienen bien protegidos.
Para que el queso dure más, seguí estos consejos prácticos
- No lo mezcles con otros alimentos: absorbe olores muy fácil.
- Usá el cajón de las verduras: tiene la humedad justa para conservar su textura.
- Reenvolvelo siempre tras cada uso: cuanto menos aire, mejor.
- Atento al moho: si aparece en quesos duros, podés raspar la parte afectada. En quesos blandos, mejor descartarlos.
Guardarlo bien es clave para disfrutarlo como recién comprado. Solo hace falta un poco de cuidado y los materiales adecuados.