Diez técnicas respaldadas por la psicología para que tu presentación inicial sea auténtica, clara y genere confianza.
Cuando conocés a alguien nuevo, el impacto inicial puede definir cómo te van a ver. El artículo original señala que aplicar ciertos trucos psicológicos puede marcar la diferencia. La respuesta al porqué: porque nuestras primeras impresiones se forman en pocos segundos y están influenciadas por señales no verbales más que por lo que decimos.
Los 10 trucos psicológicos clave
- Imitá sutilmente el lenguaje corporal o el tono de la otra persona para generar empatía.
- Mantené buen contacto visual: transmite sinceridad y seguridad.
- Sonreí de forma genuina: la actitud cálida abre puertas.
- Usá una postura abierta (evitá cruzar brazos), lo que muestra receptividad.
- Vestite y cuidá tu presentación: la apariencia habla antes que tus palabras.
- Llegá a tiempo: la puntualidad comunica respeto y organización.
- Hacé preguntas e interesate por el otro: demostrar curiosidad genera conexión.
- Mantenete auténtico: pretender ser otro genera desconfianza.
- Gestioná bien tu nerviosismo: respirá hondo, pausá si es necesario y transmití calma.
Recordá que las primeras impresiones cuestan muchísimo cambiar: lo que mostras primero tiende a quedarse.
¿Por qué funcionan estos trucos?
La ciencia lo explica: nuestro cerebro forma juicios en apenas segundos basándose en apariencia, postura y tono de voz, sin esperar a las palabras. Además, el sesgo de “primacía” hace que lo primero que mostramos pese mucho más que lo que digamos después.